El Fantasma (The Ghost)

Año 2013. Este poema fue inspirado en el estilo de "Carcajada de Estaño" (1949) de la boliviana Alcira Cardona Torrico.

Fotografía: el trabajo diario de un niño limpia parabrisas Sucre, Bolivia 2013

Soy de este mundo la mayor de las penas

soy el sufrir, el rufián de tu quebranto.

Mas con todo, pienso que es sólo envidia

de mi poderoso grito que al orbe en ancho y largo

y a todos en todos los continentes fulmina.

Soy tu guerra ¡Soy el fantasma e la pobreza!

Llegaste al mundo y me conociste, retoño,

y conociste también, crudamente, por primera vez,

el dolor del hambre conformado al pan de antaño,

el frío que desnuda y llega hasta los huesos tan soez,

el concreto sucio y helado que beben tus pies,

y cada día una lucha ¡una lucha por sobrevivir!

Ahora pues, púdrete en tu fétido deshacer,

y tus ruegos por limosna sean puros loores

de mi poder y mis agallas, que destruyen tu ser.

Ruega, implora, llora, piérdete en las calles

que tu delirio es mi goce, y tu plañir mi reír.

Soy tu sombra ¡Soy el fantasma de la pobreza!

¿Qué son pues el día y el tiempo sino fugaces

tormentos que no tienes conciencia de ellos?

¿No son para ti  aquellas personas que tanto

caminan y pasan y pasan, sólo sombras sin vida?

¿Qué es pues la gran ciudad sino un gran laberinto

e infierno de cemento que ningún recoveco cobija?

Bien sabes entonces, escoria, lo que soy ahora.

No conociste nada, ni libros, ni cuentos,  ni ensayos.

¡Cara Sucia! continúa cabizbajo que ya es hora

de llevarme a tus hijos y a tu propia esposa

para saciar mis gulas, y destilar tus lágrimas

que mi vino harán, y tus aullidos mi canto.

Y no olvides ¡Cara Sucia! de quién eres,

que no hay sueños, no hay anhelos, ni deseos

porque soy de ti tus cadenas y lo crees

porque despojarte de mí, en verdad no puedes.

Soy muchacho, la injusticia de tus harapos.

Soy tu trino ¡Soy el fantasma de la pobreza!